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Diferentes tipos de plástico, diferente reciclabilidad

Diferentes tipos de plástico, diferente reciclabilidad

Los plásticos: protagonistas indiscutibles de nuestra vida cotidiana. Un material revolucionario, tan útil como discutido, y mucho más articulado de lo que pensamos y conocemos.

Este material tiene un ciclo de vida muy largo y ha hecho nuestra vida más segura y fácil en muchos aspectos. En la mayoría de los casos, se deriva de productos químicos, obtenidos específicamente del gas y del petróleo; sin embargo, en los últimos años, se están comercializando alternativas más «orgánicas».

Los plásticos son realmente numerosos y varían en composición y características. En resumen, se crean a partir de cadenas de polímeros, que pueden ser puros o mezclados con aditivos, para obtener las características y funcionalidades necesarias.

Intentemos simplificar haciendo una primera clasificación, dividiendo los plásticos en:

  • Termoplásticos: cuando se calientan se vuelven maleables y se les puede dar forma con facilidad y luego vuelven a ser rígidos con el enfriamiento; este proceso se puede repetir varias veces.
  • Termofraguantes: pueden moldearse con la forma deseada mediante el calor, pero una vez endurecidos no pueden volver a procesarse.
  • Elastómeros: comúnmente conocidos como caucho. Material con gran deformabilidad y elasticidad.

Podemos hacer otra clasificación basada en la reciclabilidad de los polímeros plásticos. Es útil saber que el sistema americano llamado SPI (Society of the Plastics Industry), identifica los plásticos con el símbolo de un triángulo con un número específico en su interior, correspondiente al tipo de material plástico. Esta clasificación llega hasta el número 7, donde los 6 primeros corresponden a los plásticos reciclables, mientras que el número 7 es el de los materiales no reciclables.

PET – fácilmente reciclable incluso con múltiples ciclos, ya que mantiene sus características intactas durante mucho tiempo. Casi todas las botellas de agua están hechas de este material.

HDPE – Polietileno de Alta Densidad: se utiliza para diversos fines, entre ellos botellas de detergentes, tapones, tuberías o cables, pero también elementos de diseño o muebles.

PVC – Policloruro de vinilo: para crear vinilos, tuberías para la industria de la construcción, cables eléctricos, revestimiento de almacenes y muchos otros artículos técnicos de plástico.

LDPE – Polietileno de baja densidad: ligero y flexible, por lo que se utiliza en la creación de diversos artículos pequeños, bolsas y/o películas de embalaje.

PP – Polipropileno: se utiliza para fabricar artículos de uso cotidiano, como cierres, latas o juguetes para niños.

PS – Poliestireno o Styrofoam: comúnmente utilizado y conocido como aislamiento acústico o en embalajes.

Versátiles, duraderos e increíblemente adaptables, son una notable familia de materiales con la ciencia y la innovación en su DNA, por lo que debemos aprender a procesarlos y reciclarlos con la debida conciencia.